Están ahí, todos los sábados. Van llegando acompañados de castores pero también de otros scouts de todas las edades. Regalan una sonrisa agradecida cuando ven a los Scouters y siempre tienen preguntas fabulosas para ser contestadas con dudosa eficacia: a mayor necesidad de respuesta mayor dificultad para hacerlo, así son las cosas.
Sugieren, siempre tienen algo que ofrecer, algo que han visto u oído y que les ha parecido que sería muy útil para su Grupo Scout, porque, esa es la cuestión, el GS 217 Matterhorn es también "su" Grupo Scout. Muchas veces se les escucha con rapidez y sobre la marcha, mientras se hacen y preparan otras cosas y seguramente la propuesta que traen como un regalo sumaría mucho, ayudaría mucho y facilitaría más. Pero el tiempo apremia, los espacios son reducidos y el Grupo grande, muy grande.
Muchos han sido scouts y si lo han sido saben que "Scout un día, Scout para siempre" y se sienten como tales. Sin duda necesitan comparar y sentir lo de antes junto a lo de ahora y en la operación aritmética entre ambos tiempos se quedan con lo mejor de cada uno de ellos. Sienten un orgullo y una alegría palpitante y permanente porque sus hijos anden "liados con los rollos de los scouts" y juegan al sortilegio de parar el tiempo perpetuando a través de sus chavales una vivencia propia. A menudo acompañan al montaje de Campamentos y Precampamentos, se dan "un curro del quince" para dormir mal, comer frío, pelarse las manos y tirar de repertorio recordando los nudos necesarios para erguir un mástil. También se ponen la pañoleta bicolor del Grupo y lucen tan requeteguapos.
Se ofrecen a menudo porque conocen mejor que nadie todo lo que acaba necesitando un Grupo para "tirar pá lante". Seguramente hay cosas y decisiones que no tomarían como nosotros o que incluso les resultan difíciles de compartir pero saben por experiencia propia lo importante que es "andar todos a una" y sumar sin pausa para desde lo colectivo tallar los mejores troncos.
A veces reciben una llamada o una carta de correo electrónico escrita desde la necesidad pidiendo su apoyo o su participación y ,como suele ser frecuente en la vida, para tener que dar sin apenas recibir. Cuando lo hacen, consuman la Buena Acción que tanto solicitamos para cambiar el mundo desde lo pequeño y aunque también visible y efectivo y su gesto tiene efecto, recorrido y potencial y genera mucho más de lo que se reconoce e imagina.
Son, sois, los padres, madres, tutores, amigos, antiguos miembros, familiares y muchas veces un combinado de todas estas cosas al mismo tiempo. Sois un potencial sinérgico y real, tangible, del Grupo 217Matterhorn. No aprovecharlo sería imperdonable. Los grupos humanos son complejos pero es tremendamente compatible con el potencial humano trabajar para que esa complejidad revierta en una fortaleza en forma de diversidad, matices y soluciones que mejoren las situaciones preexistentes. Cuando un Grupo es grande, como el 217Matterhorn, es además imprescindible para su desarrollo hacerlo así.
No tenéis un día señalado para homenajearos como os merecéis en el calendario de efemérides scout. Por eso hoy antes de esperar a mañana es el día adecuado para hacerlo y saldar la deuda de agradecimiento que siempre sentimos hacia vosotros y muchas veces olvidamos expresaros.
Apoyar tiene su origen en el latín "podiare" significando "subir". Implícitamente refiere que no puede apoyarse para perjudicar ni impedir. Con vuestro apoyo "subimos", sois parte de la carrera, peldaños y bordones, con vosotros es más fácil y agradable. Allí dónde y cuándo un Campamento está saliendo güay, desde lo invisible estáis en nuestros Raids y Ceremonias porque las hicisteis reales trabajando desde su posibilidad.
LLenar de contenido la palabra "gracias" es un bello motivo scout para sonreír.
Largas Lunas y Buena Caza del Consejo de Grupo Scout 217 Matterhorn
Seguimos acampando,
Seguimos Avanzando...
